Tras la experiencia del año anterior, en la que terminaba como el mejor atleta no africano de la edición, el atleta español Chema Martínez vuelve al desierto prometiendo dar mucha “guerra”. Una prueba en la que dará todo de sí mismo e intentará luchar de tú a tú con los grandes dominadores de esta prueba, los atletas africanos.
Doscientos sesenta kilómetros en las arenas del sahara, a través de las impresionantes dunas de Merzouga. Una prueba de supervivencia en un lugar inhóspito con condiciones extremas y temperaturas elevadas que oscilarán entre los 12 y 45 grados entre el día y la noche.
El Maratón de Sables es una competición que en palabras del propio atleta: “el año pasado me di cuenta de que aún sigo aprendiendo. En la pasada edición tuve la oportunidad de observar y aprender de los grandes dominadores de este ultra, los marroquíes. Ver como fijan rumbo, cómo se mueven, su adaptación al medio… aún soy un novato, pero un novato con muchas ganas y mucha energía para intentar plantarles cara”.
Una primera toma de contacto que permitía al atleta madrileño conocer esos puntos débiles a trabajar para poder superarlos en sucesivas ediciones.
Chema vuelve al desierto un año después. Un año en el que el fondista olímpico no ha dejado de entrenar ni un sólo día, con las adaptaciones necesarias de entrenamiento para afrontar este tipo de ultras. “he introducido una carrera de 235 kilómetros, una carrera técnica y con mucho desnivel, The Coastal Challenge. Una de mis carencias el año pasado fueron precisamente las zonas técnicas y por eso mismo he querido reforzarlas. Así que este año en lugar de entrenar tanto en asfalto y pista como otros años he acumulado más kilómetros en montaña, en subidas, bajadas… Mis rutinas de cara a esta prueba son las mismas de siempre: entrenar lo máximo posible, descansar e incorporar esas sesiones de fuerza y entrenamiento en mochila.”
Una aventura que, como ya es habitual, Chema Martínez compartirá día a día con sus seguidores y amigos a través de las redes sociales, relatando cada etapas y sus sensaciones y motivaciones en las mismas.
Decidido a no parar de correr por su firme convicción y filosofía “No Pienses, corre” el atleta promete disfrutar y hacernos disfrutar en este nuevo desafío para el que el madrileño confiesa estar “a tope”.