3 métricas fisiológicas para medir el rendimiento en el ciclismo profesional

Al monitorear los aspectos claves del uso que se da a la bicicleta y al progreso del ejercicio, se puede comprender mejor el nivel de rendimiento actual y los pasos que se debe seguir para mantenerse en buena forma o continuar mejorando. Durante el trayecto, existen  dispositivos que recopilan datos para monitorear las métricas del ciclista. Es necesario añadir que algunas de estas métricas requieren sensores externos para funcionar adecuadamente.

Con la información recopilada será posible establecer nuevas marcas, diseñar exigentes rutinas de entrenamiento que reten nuestra resistencia, así como identificar debilidades y factores de mejora.

 

1. Estado del entrenamiento

El estado de entrenamiento ofrece una visión amplia y generalizada de los hábitos de ejercitación. A partir de esto se comprende a profundidad la evolución de la rutina que desarrollamos diariamente.

En el mercado se encuentran dispositivos que calculan varias dimensiones como el VO2 máximo Este dispositivo registra la carga de entrenamiento en los últimos siete días, además presenta consejos para mejorar las decisiones que se deben tomar sobre el entrenamiento.

Esto es útil pues después de un periodo extenso de descanso por lesión u otros motivos, la condición física se deteriora, sin embargo, teniendo acceso a la información de carga de entrenamiento anterior, esta pausa podría ayudar a mejorar la condición física o facilitar el retorno. Llevar un control de nuestra capacidad física es imprescindible, aunque entrenar excesivamente de forma periódica es contraproducente.

 

2. VO2 máximo

El VO2 máximo mide la condición cardiorrespiratoria y la capacidad de rendimiento aeróbico. Este dispositivo permite identificar la condición física actual y registrar los cambios según avance el tiempo. Ayuda a establecer objetivos personalizados acorde a nuestra evolución y determina la eficacia del entrenamiento, además brinda la motivación necesaria para alcanzar los objetivos establecidos.

Este sistema de análisis incluye el uso de relojes inteligentes o ciclocomputadores para interpretar y analizar precisamente los datos del rendimiento durante el recorrido.

 

3. Tiempo de recuperación

 Dar al cuerpo la oportunidad de recuperarse adecuadamente garantizará el incremento de fuerza durante el entrenamiento. También minimiza el riesgo de lesión  y evita las consecuencias que deja el síndrome de sobreentrenamiento.

El tiempo de recuperación actúa como un temporizador de cuenta regresiva, pues prevé la completa recuperación física para para realizar nuestro siguiente reto. Este temporizador se actualiza al final de cada actividad

En general, los rendimientos similares necesitan un tiempo de recuperación parecido, aunque existen excepciones donde se puede tardar más de lo normal en recuperarse. En ocasiones, se encuentran  estos casos cuando existe un aumento repentino en la carga de entrenamiento de siete días en comparación con la carga normal.