CROSSCALL ACTION-X5: «El smartphone favorito del Yeti»

 

Texto: Miguel Caselles / Fotos: CROSSCALL

Cualquier actividad deportiva en la montaña precisa de material específico y como es lógico el smartphone no puede faltar en la equipación. Al igual que el resto del equipo tendrá que soportar golpes y agentes atmosféricos, aportar seguridad personal y prestaciones fiables sobre el terreno. Atendiendo a esos condicionantes la marca francesa CROSSCALL propone a los deportistas más aventureros su modelo Action X-5. Una herramienta realmente útil cuando se afrontan cumbres, travesías a pie, en bici, náuticas, barranquismo, esquí y toda actividad poco recomendable para un smartphone convencional. Además de contar con cámaras de acción y mesa de edición en el propio smartphone.

Todo en el bolsillo

El teléfono móvil está presente en todas las facetas de la vida como ventana de información, ayudante personal, creador de contenidos audiovisuales y gestor de actividad profesional y de ocio. Una inagotable fuente de utilidades propias de la ciencia ficción hace solo unos años. Si nos centramos en las actividades lúdicas o deportivas que se desarrollan en la montaña no llevar encima un smartphone roza la imprudencia. La seguridad que nos ofrece el smartphone en caso de accidente o ante a una situación de emergencia es inmediata. No solo por lanzar una llamada de auxilio, también porque tenemos la posibilidad de enviar a los servicios de rescate nuestra geolocalización o emprender una retirada segura gracias al GPS del propio smartphone en combinación con alguna aplicación de orientación. Precisamente las aplicaciones más demandadas por quienes se mueven entre montañas son las que permiten utilizar el smartphone como un GPS de montaña.

Gracias a las constelaciones de satélites del Sistema Global de Navegación por Satélite; GPS (estadounidense), Glonass (ruso), Galileo (europeo) y Beidou (chino) podemos conocer nuestra ubicación exacta sin necesidad de cobertura telefónica ni de datos móviles en cualquier zona del mundo sin coste alguno. Por tanto es factible utilizar el móvil de igual modo que un GPS de montaña, siempre que descarguemos previamente mapas y tracks/rutas de la geografía terrestre, o marina, donde vayamos a realizar la actividad planeada. Lo lógico es descargarse las rutas que no se conocen, no obstante conviene llevar también esas que aunque conocemos pueden hacernos dudar si cae la niebla o la noche. Tampoco está de más haber cargado rutas secundarias que pudieran ser utilizadas como vías de escape ante complicaciones durante la excursión. Con el añadido (si se dispone de cobertura) de tener acceso a la predicción meteorología antes de tomar decisiones sobre la marcha. Si a esto sumamos que el propio smartphone es un equipo fotográfico y de filmación, cabe decir que una parte importante de la equipación montañera entra en un bolsillo. Ahora bien, las limitaciones de los móviles clásicos en cuanto a duración de batería son su principal vulnerabilidad con el paso de las horas. Un inconveniente que como veremos más adelante algunas marcas han solucionado.

CROSSCALL a prueba de deportes extremos

Un teléfono móvil inservible tras empaparse del oleaje en mitad de una tormenta fue el origen empresarial de la compañía francesa CROSSCALL. El malogrado teléfono pertenecía a Cyril Vidal, empeñado desde entonces en diseñar smartphones que no queden fuera de juego cuando más son necesarios. Han pasado trece años de aquel episodio y en este tiempo CROSSCALL se ha convertido en marca de referencia internacional en el mercado de terminales que se adaptan a entornos severos, sin por ello renunciar a las prestaciones de los mejores smartphones convencionales. Dice mucho de la marca que sus teléfonos hayan sido seleccionados como herramienta de trabajo por cuerpos de policía y rescate en Francia.

La última creación de CROSSCALL es el modelo Action X5 que vamos a reseñar por sus eficaces capacidades y aplicaciones en escenarios de intemperie. Monta sistema operativo Android 11 y procesador Qualcomm Snapdragon 662 Octo-Core a 1,8 GHz, 4 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento, ampliable a 512 GB mediante microtarjeta SD. Un potente ordenador de bolsillo hecho para durar a pleno rendimiento. No solo por las pruebas de resistencia que el Action X-5 ha superado antes de salir al mercado, también porque CROSSCALL ecodiseña sus dispositivos simplificando el desmontaje y recambio de piezas (índice de reparabilidad de 8,8 sobre 10). La apuesta de la marca es reparar en lugar de desechar, prolongando así el aprovechamiento responsable de los dispositivos electrónicos. Adicionalmente el Action X-5 estira la garantía hasta cinco años con el compromiso legal de que todas sus piezas estarán disponibles durante diez años a partir de que el modelo deje de fabricarse.

Ni se rompe ni se rinde

Por muy bueno que sea un smartphone convencional tendremos que ser muy cuidadosos si lo utilizamos en actividades exigentes al aire libre. Durante una salida de montañismo fácilmente pude sufrir caídas sobre roca, barrizales y charcos, aplastamientos, arañazos, temperaturas extremas, cambios de presión, aguaceros, ventoleras de polvo y arena, condensación de sudor y cualquier otro factor o incidente posible en plena naturaleza. Desde luego si nos movemos en esos contextos es interesante disponer de un teléfono al que no haya que mimar sin renunciar por ello a las prestaciones más avanzadas. Así es CROSSCALL Action X-5.

El cuerpo del Action X-5 cuenta con las certificaciones IP 68 y MIL-STD-810 cuyos estándares son de máxima protección y resistencia en un dispositivo utilizado en condiciones ambientales extremas. Entre otras pruebas de laboratorio toleradas por este teléfono, soporta caídas de hasta dos metros sobre hormigón por sus seis caras, estanqueidad a polvo y arena, impermeabilidad a agua clorada o salada durante 30 minutos a dos metros de profundidad, cambios de presión por gran altitud y temperaturas entre -46°C y +71°C (en optimo uso de -25°C a +60°C). Los puntos críticos ante posibles filtraciones son el puerto USB y el jack de los auriculares que permanecen sellados herméticamente por tapones de goma de quita y pon. Como parte de la resistente estructura exterior la pantalla está blindada con vidrío Corning Gorilla 5 de 0,8 mm de grosor, a prueba de arañazos y absorción de impactos de un julio de fuerza. Frente a otros smartphones de alta resistencia o rugerizados sorprende por su ligereza, 235gr de peso, similar al de otros smartphones convencionales de igual tamaño.   

Estiloso y maniobrable

Por apariencia, incluso manteniéndolo en la mano, no parece un terminal destinado a superar todo tipo de adversidades. Sus dimensiones 161,5×77,8×13,3 y pantalla de 5,45”, formato 18:9, permiten alcanzar el 80% de la pantalla con una mano. La interacción con el Action X-5 a través de esa generosa pantalla es fluida a la hora de ver contenidos de internet, juegos, películas, libros… Y lo que más nos interesa en una salida montañera, seguir nítidamente el track sobre el mapa de la ruta que hayamos emprendido. Ya sea con los dedos mojados bajo un aguacero o con los guantes puestos no hay problema al desplazarse por la pantalla. Resolución de 1400×720 píxeles (HD+) y brillo de 500 cd/m², perfectamente legible a pleno sol.

Las líneas suaves de la carcasa protegida por TPU (poliuretano termoplástico) y una textura estriada y antideslizante favorecen la sujeción en seco y mojado del Action X-5. Pero por si se nos escapara de las manos, ubica un orificio en la esquina inferior derecha donde engarzar una cinta de cuello o un coordino que trabar a cualquier asidero de la ropa o el arnés. Manejar un smartphone sobre la marcha puede resultar engorroso por lo que cuenta con dos botones multifunción configurables, a la altura de los dedos pulgar e índice de la mano derecha, que simplifican varias acciones sin tener que desbloquear el teléfono. También son programables los dos botones de volumen cuando se utiliza la aplicación de filmación/foto. El Action X-5 acepta dos tarjetas nano SIM. Es una opción interesante cuando viajamos fuera de países con roaming gratuito ya que podremos instalar una tarjeta de operadora local, además de la propia. O porque permite utilizar dos tarjetas de compañías diferentes de tal manera que abarquemos geográficamente más cobertura. También admite una tarjeta de memoria micro SD que suma un extra de almacenaje, fotos, vídeos, música…, de 512 GB. Las tres tarjetas están albergadas en una misma bandeja extraíble.

Batería de larga duración

Sabido es que el principal problema de un teléfono convencional en zonas de montaña es la limitada duración de la batería. No sucede así con el Action X-5. Los 3.850 mAh de su batería en combinación con el procesador Qualcomm 6115 Octocore optimizan rendimiento y ahorro de energía. Según indica la marca el resultado de esa asociación es una autonomía de 25 horas en conversación, 22 días en espera y 11 horas en modo GPS (GPS + Data + mapas Google activados + brillo de pantalla 100%). Este plus de energía permite transferir carga (carga inversa) a la batería de otro smartphone o dispositivo compatible con USB, por ejemplo, la tan necesaria frontal cuando cae la noche.

Incluso con una batería potente conviene estirar todo lo posible su autonomía en las excursiones por montaña. Ya sea con periodos de apagado de teléfono, modo avión (se desactiva el GPS) o modo ahorro de energía. El consejo general es deshabilitar los datos móviles ya que el teléfono rastrea constantemente antenas de telefonía a costa de la batería y activarlos solo cuando sea necesario. Como se ha mencionado, podremos seguir cualquier ruta haciendo uso del GPS del smartphone sin conexión a internet, sin datos. Simplemente hay que tener instalada alguna de las aplicaciones que permiten gestionar offline mapas y tracks de la ruta elegida. Como referencia, Wikiloc es una de las apps de orientación outdoor más populares.

Un reportaje de cada excursión

Pensando en momentos irrepetibles CROSSCALL ha equipado al Action X-5 con varias cámaras para no perder detalle ni encuadre en lo más alto de esa formidable montaña que acabamos de ascender. Dos traseras, una de 48MP con objetivo general de 80º y otra de 13MP con gran angular de 120º, ideal en encuadres panorámicos e imágenes de acción. Añade también una cámara frontal similar a esta última de gran angular muy práctica al disparar autofotos porque entraremos todos en el encuadre dando también protagonismo al paisaje. A la hora de filmar, la aplicación X-CAM, propia de CROSSCALL, ayuda en la selección de objetivos y diferentes modos, Time Laps, Slow Motions y Dash Cam (filmación continua para rescatar la toma que más interese). Sin preocuparnos por vibraciones o gestos bruscos gracias al estabilizador de imagen HYPERSTAB encargado de mantener el horizonte recto a pesar del movimiento del deportista, rectifica hasta 10º respecto de la horizontal.

  

Fotografiar y filmar compartiendo grandes momentos a través de las redes sociales o sencillamente crear ese recuerdo que en el futuro volverá a hacernos soñar. Se cual sea la motivación, una vez tengamos material filmado o fotografiado, con la aplicación X-STORY disponemos de una herramienta de edición y montaje audiovisual intuitiva y rápida en el propio smartphone. Según la creatividad de cada cual podrá seleccionar las mejores secuencias, organizarlas, ralentízalas, aceléralas, cambiar de ángulo, dinamizarlas con música, aplicar efectos… En definitiva, contar a nuestra manera la historia de la aventura deportiva realizada.

Aplicaciones CROSSCALL que dan seguridad

Además de los cientos de aplicaciones móviles que ofrecen las diferentes plataformas, CROSSCALL ha diseñado aplicaciones propias pensando en la optimización de sus smartphones y en los recursos que pueden ser necesarios en territorios de aventura. Una de ellas es la app de comunicación X-TALK que convierte el smartphone en un walkie-talkie. Sin limitación de distancia y con opción de comunicación simultanea entre los integrantes de un grupo de escalada, trekking, esquí, ciclismo de montaña, etc., además de poder compartir tu ubicación y recibir la de otros. Es compatible con terminales Android en conexión 2G, 3G, 4G o Wi-Fi. Las comunicaciones se reciben directamente sin descolgar. Muy útil en cualquier actividad que no permita maniobrar fácilmente con el teléfono. Al hablar solo hay que pulsar uno de los dos botones programables del teléfono que previamente hayamos destinado a tal fin.

Otra app de CROSSCALL es la de socorro X-SAFE. En caso de vernos en apuros y necesitar ayuda esta aplicación permite alertar inmediatamente por mensaje predeterminado y/o llamada a la persona o personas que hallamos designado como receptores. La aplicación está asociada a uno de los dos botones programables del smartphone mediante triple pulsación consecutiva (se puede sustituir por una pulsación prolongada). O si se prefiere por accesibilidad vincularla al otro botón programable situado en el lateral opuesto del teléfono. Una vez se lanza automáticamente la llamada o el mensaje de emergencia se inicia una cuenta atrás de cinco segundos para su cancelación por si ha sido activada por equivocación. Sin olvidar que tendremos operativo el teléfono de emergencias 112 siempre que alguna compañía tenga cobertura GSM donde nos encontremos, sea o no la nuestra compañía, tengamos o no saldo, incluso sin tarjeta. De igual modo funciona el botón de emergencias que incorporan los actuales sistemas operativos, lanza la llamada al teléfono de emergencias que corresponda en función del país donde estemos.

Accesorios CROSSCALL que multiplican prestaciones

CROSSCALL comercializa accesorios propios en función del uso que se vaya a dar al smartphone. Mencionáremos aquellos específicamente dirigidos a la actividad deportiva al aire libre. Todos se acoplan y desacoplan con un solo clic por medio de la pieza auxiliar de sujeción X-BLOCKER (soporta 20 kilos de tracción y viene incluida en la caja del teléfono) y el sistema magnético X-LINK que el Action X-5 lleva en el dorso. Este imán es a la vez un conector magnético que evita cables en la conectividad con otros dispositivos y permite carga inalámbrica.

Batería externa X-POWER. Energía extra por si agotamos la batería del teléfono o de cualquier otro dispositivo. Gran poder de carga adicional con 6000 mAh de autonomía. Al igual que el teléfono este powerbank tiene certificación IP67 de protección frente al polvo y la inmersión. Su uso es sencillo e inmediato ya que permite cargar o reanimar el smartphone sin necesidad de cable. Se imanta a la espalda del smartphone con el sistema magnético X-LINK (evitamos así abrir el tapón que mantiene sellado el puerto USB). También es compatible con cable USB al propio teléfono u otro dispositivo.  

Arnés X-CHEST. Es un arnés ajustable que permite llevar el Action X-5 a la altura del pecho como una cámara de acción subjetiva, por ejemplo, en piragüismo, barranquismo o en descensos de bici de montaña.

Palo selfie/trípode X-STICK. Son dos gadgets muy socorridos integrados en un solo accesorio. Mediante una pértiga plegable/desplegable en cuatro extensiones, de 18cm a 60cm, se transforma en palo selfie y también en trípode con tres estables patas desplegables. Ajustando el cabezal multidireccional eliges encuadre horizontal o vertical. Filmar y fotografiar a distancia tan solo depende del botón de un pequeño mando a distancia, con cordón antipérdida, conectado por Bluetooth al smartphone.

Fijación X-BIKE. Soporte para fijar fácilmente el teléfono a cualquier manillar de bicicleta. Se instala sin herramientas y el teléfono se acopla en un instante mediante el imán X-LINK y el bloqueador X-BLOCKER. Ajustando las dos rotulas multidireccionales del soporte se coloca el ángulo de visión y posición vertical u horizontal del teléfono. No hay miedo a que el teléfono salga volando en un descenso trialero porque el soporte con el teléfono montado aguanta 20 kilos de fuerza. Compatible con cualquier tubo similar al del manillar de una bicicleta.

Recordamos que con la compra del terminal se incluyen enchufe cargador, cable USB, extractor de bandeja SIM, auriculares sumergibles, cinta de sujeción al cuello y bloqueador X-BLOCKER.

Más Información: www.crosscall.com/es