Estando en los Estados Unidos me he enterado de que en el triatlón español están saliendo a luz casos de dopaje. La que hasta ahora era la mejor triatleta de fondo del país ha sido sorprendida en casi su última carrera deportiva dando positivo por EPO y ahora en la «Operacio Cursa» hay grandes nombres que de momento no salen a relucir…
Nunca me he pronunciando sobre el doping porque es un tema que siempre he querido pensar que es ajeno a mi deporte. Es más, los dos unicos positivos que conozco han sido de un americano y un canadiense por cocaína y que suena más a una fiesta mal pegada que a una ayuda externa en sus rendimientos.
Aunque nadie está libre de pecado sí puedo estar tranquilo de que muchos de mis rivales van limpios.
En mi opinión hablo del no dopaje por una sencilla razon de oportunidades. La mayoría de nosotros que venimos de caminar o montar en bicicleta y que un accidente o enfermedad nos quiso dar una segunda oportunidad, hace que todo lo material pase a segundo plano. Tengo amigos y conocidos que están en silla por ser tiroteados por la banda rival, otro por un tiro en una pelea, otro que estaba tan enganchado al caballo que la médula se le secó… Esa oportunidad que dios, alá, buda o… mi bicicleta nos dio, hace que muchos de nosotros nos conformemos con poco más que un reconocimiento familiar o de nuestros amigos… y eso de veras tiene más valor que cualquier dólar, medalla o récord que puedas conseguir.Solo pensar en tu padre, tu madre, hermano o amigo que durante años presumía de tus logros en el barrio o en tu ciudad, serviría para que se te cayera la cara de verguenza al saber que esa persona que tanto te quiere el día que te pillen tendrá que ir con la cabeza agachada, avergonzado y escuchando que bueno era, ¿no?
El doping compartirá nuestras vidas mientras el dinero, ser famoso o el poder siga siendo el mayor exponente para ser algo en esta sociedad, pero solo los sentimientos y el cariño a los tuyos puede vencer esta lacra.
Yo no os prometro salir en la portada del Marca o del Mundo Deportivo, tampoco ganar una medalla en unos Juegos Paralímpicos, pero sí os juro que seguire siendo el «puto amo».
Os escribe uno que esta loco perdido, sí, zumbado, pero buena gente.