Análisis realizado por Miguel Marne Martínez @miguelmarne
Si hay un modelo de Asics que ha marcado una época, ese es el Gel Nimbus. Ha sido uno de los estandartes de la marca japonesa, la cuál marcó una nueva época al introducir la tecnología GEL™, que desarrolló a finales de los años 90.
Desde sus orígenes la marca se centró en llevar el deporte a todo el mundo, y promover la actividad física como estilo de vida (ASICS es acrónimo de “Anima Sana In Corpore Sano”), y para ello se centró en desarrollar un calzado cómodo, con capacidad de adaptación y accesible tanto para deportistas profesionales como populares. La tecnología ASICS GEL™ reduce los impactos, aumentando su absorción, y está estratégicamente colocada para ofrecer la mayor comodidad posible, algo que convierte a las zapatillas que la incorporan en sinónimo de confort.
Los últimos modelos de la Gel Nimbus han estado marcados por unas líneas muy características, y un modelo muy significativo a la hora de encajar amortiguación y upper. Puede decirse que era un modelo que funcionaba y por ello no había sido necesario introducir ningún cambio importante.
Pero la revolución que en los últimos años ha tenido lugar en el mundo del calzado deportivo orientado al running, no ha traído solamente las placas de carbono a nuestros entrenamientos, sino que ha propiciado cambios radicales en la forma de entender la amortiguación y la eficiencia que podemos conseguir con ésta. El cambio hacia el maximalismo de mano de amortiguaciones sobredimensionadas ha calado en todas las marcas, y nadie ha querido quedarse atrás. Es por eso que, con ciertos aires de intriga y secretismo, ASICS anunciaba hace unas semanas la llegada al mercado de una zapatilla revolucionaria en su historia, y nos mostraba las líneas de lo que iba a ser su nuevo “estandarte”. Toda esa intriga iba a llevarnos a descubrir la última y más radical versión de la Nimbus.
Como siempre, analizaremos de manera objetiva las características constructivas de este modelo, y realizaremos un análisis basado en la percepción personal y que arroje datos sobre los principales parámetros dinámicos de carrera.
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UPPER
Se trata de un upper especialmente cómodo, construido con una malla “knit” sin costuras que evita cualquier tipo de tacto incómodo en su interior, añadiendo además una perfecta transpirabilidad para la evacuación del sudor. Es un tejido consistente, por lo que no vamos a encontrarnos con una malla “super ligera”, pero si con un grado superior de comodidad.
Los refuerzos internos de la zapatilla, tanto en su parte delantera como en el talón son más que suficientes para asegurar una buena protección de estas zonas más sensibles, además de favorecer la estabilidad de la pisada. Para que este refuerzo no reste en ningún momento la comodidad que presenta el conjunto, el acolchado en esta zona es generoso y en ningún momento se siente algún punto susceptible de provocar rozaduras.
Como aspecto distintivo y novedoso vamos a mencionar la lengüeta: elástica y anclada mediante tres puntos tanto al upper como a la mediasuela, ofreciéndonos dos grandes ventajas: por una parte, nos aseguraremos de que no hay movimientos indeseados de ésta en carrera, y por otra nos ofrece una facilidad para calzarla que no habíamos visto en ningún otro modelo. Además, se complementa con un “lazo” de agarre en la parte posterior que aún facilita más esta acción. Si pensamos en deportes como el triatlón, serían detalles muy a tener en cuenta a la hora de mejorar en una transición.
Completamos con un cordón de construcción tubular que asegura un buen atado y evita posibles molestias en el empeine, y una plantilla con tecnología OrthoLite™ X-55, que mejora la pisada y otorga una excelente resistencia y transpirabilidad.
Por otra parte, al menos el 75 % del material principal del upper está hecho con materiales reciclados para reducir la huella de carbono. El forro interior resulta de un proceso de teñido en solución que reduce el uso de agua en aproximadamente un 33% y las emisiones de carbono en aproximadamente un 45% en comparación con la tecnología de teñido convencional. No es un dato que mejore nuestra carrera, pero sí es un dato que agradecemos a ASICS por haberlo tenido en cuenta.
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MEDIASUELA
ASICS incorpora en las Nimbus su tecnología FlyteFoam Blast Eco Plus (con un 20% más de espuma), un compuesto que proporciona una amortiguación extremadamente cómoda, en detrimento de una reactividad excesiva. Y aunque llama poderosamente la atención a cualquier conocedor de este modelo, y visualmente no la encontramos como en modelos anteriores, ASICS sigue incorporando su tecnología PureGEL, ahora renovada y más suave, proporcionando aterrizajes y transiciones aún más agradables.
A continuación vamos a analizar las principales características constructivas de este modelo:
Drop: tomamos medidas del “stack”, y con 38mm en el talón y 30mm en el metatarso obtenemos un drop de 8mm, que coincide con el que marca su hoja de características. Es un drop que está dentro de lo esperado en este tipo de zapatilla, aunque sí cabe destacar su gran stack, cercano al límite de los sabidos 40mm que debe cumplir. Por lo tanto, generosa amortiguación.
Base: medimos el ancho a lo largo de la zapatilla que describe su proyección, obteniendo 101 mm en talón, 86 mm en puente y 120 mm en metatarso. Es evidente que contamos con un sobreancho importante que contribuye a estabilizar una zapatilla que carece de elementos rigidizadores en esta zona. Llaman la atención la medida del puente, que si comparamos con algún otro modelo evidencia un ancho importante en esta zona, y favorece el apoyo del puente plantar.
Rocker: presenta “balancín” tanto en talón como en punta, y medimos un “heel rocker” de 17mm y un “nose rocker” de 48mm. El primero facilita la fase de aterrizaje, y no penaliza a aquellos corredores con una técnica no muy depurada en su fase de aterrizaje, mientras que el segundo no es muy agresivo, y nos da una idea del tipo de zapatilla que tenemos ante nosotros.
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SUELA
La suela cuenta con la tecnología “AHAR™ outsole rubber”, que mejora la durabilidad de la misma y hace que su diseño no cuente con mucho material, permitiendo reducir algunos gramos de peso en el conjunto de la zapatilla.
Observamos que las zonas de solado sólo corresponden a los puntos de mayor exposición a la pisada – zona de metatarsos y talón – dejando expuesta la mediasuela en el resto de la base. Esta tendencia que ya es habitual en las zapatillas de “altas prestaciones” se está trasladando a otro tipo de calzado no tan “radical”, pero que puede beneficiarse de esta reducción de material y utilizar mejores compuestos tan solo en las zonas que van a acumular prácticamente la totalidad del desgaste.
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ANÁLISIS
Nada más ponernos las zapatillas cobra sentido toda la campaña de marketing de esta Nimbus: ¡son realmente cómodas! Es la primera sensación que se tiene desde que se prepara el calzado. Tacto amigable, lengüeta elástica y “tirador” en el talón para facilitar la introducción del pie; acolchado en la parte trasera que evita cualquier sensación de “puntos de contacto” con el refuerzo, malla adaptable y guiado de cordones sin ojales en la parte del empeine. Todo ello para conseguir un efecto “calcetín”, que proporciona la sensación de llevar un upper “de una sola pieza”.
Una vez calzadas y a pesar de ese extra de espuma en su mediasuela con el que cuenta, la sensación es de estabilidad. Ya en carrera se confirma que en ningún momento esa carencia de “elementos estabilizadores” penaliza el apoyo. El terreno donde se han probado es mixto, y ni siquiera en las zonas más irregulares se ha tenido algún problema.
La dinámica de carrera es agradable a ritmos constantes, y la geometría de la zapatilla proporciona a la vez confort y facilidad en la ejecución. No dificulta ni penaliza por sus grandes dimensiones en planta y el peso es lo suficientemente contenido como para no lastrarnos. El drop de 8 mm no condiciona las posibles carencias en la técnica de carrera, y al mismo tiempo no facilita el “taloneo” en la fase de apoyo. Es para nosotros una solución más que aceptable para una zapatilla que, como veremos más adelante, puede clasificarse como “de entrenamiento”.
La amortiguación por su parte cumple con las expectativas, y genera una sensación de confort y contención del impacto muy marcada. No se genera estrés y esto permite alargar sin miedo las tiradas. Por otro lado, sí se puede llegar a echar en falta algo más de reactividad, ya que esta marcada amortiguación tiende a “dormir” el pie durante el aterrizaje, suavizando el impacto pero reduciendo el retorno necesario durante el despegue. No debemos interpretar esto como una debilidad, ya que siempre dependerá del uso que pretendamos darle a nuestro calzado. Si no buscamos el rendimiento puntual, sino la comodidad y la necesidad de correr “largo”, esta característica pasa a convertirse entonces en una ventaja agradable.
En cuanto a la suela, hemos podido comprobar su efectividad tanto en asfalto como en pistas de tierra, obteniendo resultados óptimos en el primero y bastante aceptables en el segundo. Evidentemente están diseñadas para correr en terrenos firmes y con agarre, pero podremos usarlas, sin mayores aspiraciones, también “off-road”.
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CONCLUSIONES
Definitivamente podemos asegurar sin miedo a equivocarnos que ASICS ha desarrollado una magnífica evolución de uno de sus más laureados modelos, la Nimbus. Tenemos desde este momento una de las mejores y más versátiles opciones si lo que buscamos es nuestra zapatilla de entrenamiento.
Abandonar una línea a la que se le había dado continuidad durante 24 ediciones para introducir un cambio tan radical debía sostenerse con mejoras y novedades evidentes, y así ha sido. Se ha conseguido una gran zapatilla, con un carácter propio, y que pasa a formar parte con garantías de este nuevo segmento de zapatillas de entrenamiento “hiper amortiguadas” que no pierden efectividad ni estabilidad para conseguir un confort extraordinario. El maximalismo encuentra su sitio en este segmento también con la marca nipona.
Tenemos por lo tanto una zapatilla de entrenamiento, neutra, con una geometría y un ajuste que pueden adaptarse a cualquier tipo de corredor. Son extremadamente cómodas y van a darnos kilómetros de rodaje con un extra de protección y comodidad. No pretenderemos encontrar una zapatilla orientada a la máxima eficiencia, a la competición o a los entrenamientos de calidad, pero sí es el complemento perfecto para acumular distancia a ritmos de rodaje
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FICHA TÉCNICA (datos oficiales)
- Upper: Engineered knit (malla de una capa que envuelve el pie y mejora la transpirabilidad.)
- Mediasuela:
- FF BLAST™ ECO PLUS technology (con un 20% más de material que mejora la absorción de impactos).
- PureGEL™ (evolución de la tecnología ASICS Gel).
- Suela: AHAR™ (mayor durabilidad).
- Drop: 8 mm.
- Peso: 305 g (talla USA10 -hombre-).
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