Hasta hace unos años, los únicos tratamientos para el dolor eran sistémicos, es decir, administrados por vía oral, con los consiguientes riesgos de toxicidad hepática y renal.
Pero la actualidad, quienes sufren trastornos que cursan con dolor y/o inflamación disponen de un amplio abanico de cremas y medicamentos de aplicación tópica, que pueden adquirir libremente en cualquier parafarmacia online y cuyos efectos secundarios son mínimos e infrecuentes.
Y la gran paradoja de esta oferta tan variada es que, en muchas ocasiones, el interesado no sabe qué solución será más efectiva o se pierde entre el océano de opciones disponibles.
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¿Cuáles son las mejores cremas antiinflamatorias de farmacia?
En internet podemos encontrar decenas de soluciones, supuestamente naturales e inocuas para el organismo, que prometen un alivio casi mágico del dolor. Por eso debemos ser especialmente cuidadosos a la hora de decidirnos por uno.
¿En qué tenemos que fijarnos para tener la seguridad de que adquirimos un producto de eficacia certificada y no un producto milagro de escasa efectividad y alto precio? Evidentemente, en los principios activos que contiene y en la concentración de los mismos.
A modo de ejemplo, estos son los principios activos, producidos mediante síntesis de laboratorio, más eficaces para aliviar el dolor y la inflamación:
- Ácido salicílico
- Diclofenaco
- Etofenamato
- Ibuprofeno
- Paracetamol
Y estos otros están recomendados para quienes prefieren usar antiinflamatorios y analgésicos naturales:
- Árnica
- Corteza de sauce
- Cúrcuma
- Hipérico
- Nuez moscada
Pero el secreto no es utilizar ingredientes escogidos de una lista de principios antiinflamatorios o analgésicos, sino en incluirlos o combinarlos en las proporciones adecuadas. Además, los ingredientes que facilitan la penetración del producto en los tejidos afectados a través de la piel son tan importantes como los propios principios activos.
Por ejemplo, de nada servirá aplicarse una infusión acuosa de árnica sobre la zona afectada, ya que la penetración será mínima y muy lenta. Deben utilizarse ingredientes que abran los poros, dilaten los vasos sanguíneos y garanticen una absorción que sea masiva y rápida.
Repasemos cuáles son las cremas, geles y sprays de farmacia que destacan por su alta efectividad a la hora de eliminar molestias, dolores e inflamaciones a nivel local:
- Fisiocrem: se trata de un preparado elaborado con ingredientes naturales de propiedades antiinflamatorias y analgésicas, como el árnica y el hipérico. Si eres de los que no gustan de los principios activos de síntesis, olvídate de algunos productos casi milagrosos que se anuncian por internet y que no son más que simples combinaciones de hierbas: este preparado de farmacia es tu primera opción.
- Voltadol: el diclofenaco es su principio activo. Esta sustancia destaca por sus espectaculares efectos analgésicos y por su rapidez de acción, especialmente en inflamaciones y dolores causados por traumatismos.
- Flogoprofen: es un gel que contiene etofenamato, un potente analgésico y antiinflamatorio cuya efectividad supera a la de la campaña televisiva que ha hecho que este medicamento sea universalmente conocido en España. Quienes prefieran una forma de aplicación más cómoda pueden decantarse por Flogoprofen Spray, una opción que es absorbida velozmente por la piel y no es susceptible de provocar cercos o manchas en la ropa.
- Radio Salil: este compuesto contiene varios principios activos de laboratorio, entre los que destacan el salicilato de metilo y el ácido salicílico, ambos muy resolutivos contra la inflamación y el dolor. De hecho, el segundo es el principio activo de la universalmente conocida y eficaz Aspirina de Bayer. La crema Radio Salil se caracteriza por sus efectos rubefacientes (genera calor en la zona de aplicación).
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Usos de las cremas antinflamatorias
Todas estas cremas de farmacia pueden usarse en aquellos casos en los que experimentemos dolor y/o inflamación a nivel local, bien a causa de un traumatismo o de un trastorno óseo o muscular de carácter crónico. Sus usos más habituales son los que siguen:
- Tendinitis
- Esguinces de tobillo
- Síndrome del túnel carpiano
- Lumbalgias
- Trastornos de ciática
- Dolores de espalda y hombros
- Trastornos crónicos de las cervicales
- Artrosis y artritis
- Fascitis plantar
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Conclusiones sobre el uso de cremas antiinflamatorias
En resumen, los geles y cremas antiinflamatorias son un valioso recurso para atajar los dolores e inflamaciones de carácter focalizado, sean éstos de carácter agudo o crónico.
Sus efectos son más rápidos que los de los medicamentos administrados por vía oral y, además, se evitan sus efectos secundarios a nivel hepático o renal.
Esto es especialmente importante en los pacientes que padecen dolores crónicos y en los deportistas de alto nivel que sufren frecuentemente golpes y sobrecargas o distensiones musculares.
Para finalizar, añadimos que el uso de estos geles, cremas y sprays antiinflamatorios no aporta beneficios a los pacientes que experimentan dolores localizados cuyo origen es neuropático. En estos casos, la única forma de aliviar el dolor es aplicar el correspondiente tratamiento farmacológico sistémico, que variará en función de si el origen del dolor se encuentra en el SNC (sistema nervioso central) o en el SNP (sistema nervioso periférico).
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