Texto y foto: FETRI
Javier Gómez Noya volvió a Pontevedra para ganar. El subcampeón olímpico regresaba a la competición nacional en casa, en territorio conocido para él, y con unos deportistas que querían disfrutar de la oportunidad de competir con el mejor triatleta del mundo. Así, tuvo que trabajar y mucho para entrar en solitario por la línea de meta.
La expectación por ver al cuatro veces campón del Mundo en acción era evidente con el gran número de público congregado por algunas de las arterias principales de la localidad. En el Puente de los Tirante, lleno hasta la bandera para mostrar el cariño por un deportista que se gana al público con cada acción y cada gesto. Así, su presencia en Pontevedra fue un reclamo espectacular para el público, que no dejó de animar a los deportistas desde el inicio. Los cien triatletas saltaron a las aguas del Lérez, sin neopreno por la alta temperatura, y teniendo claro que había fuertes corrientes, como ya había sucedido con las chicas.
Por delante 750 metros para medir las fuerzas y lo cierto fue que aunque el gallego estaba en el grupo cabecero, no iba en solitario. Salió del agua junto a David Castro y Guillén Rojas, y así llegaron y salieron de la primera transición, con un trío en cabeza. Pero muy pronto, en la primera vuelta de ciclismo, el trío se convirtió en cuarteto, al incorporarse al grupo Ricardo Hernández, que también conoce a la perfección este recorrido y quien en una brillante primera vuelta lograba enganchar con los líderes. Estos cuatro deportistas marcaron un ritmo altísimo, a más de 40 kilómetros hora, y nadie quería descolgarse. Javi y Ricardo trabajaron constantemente para aumentar las distancias en un bloque delantero que en su conjunto colaboró de forma muy coordinada, relevándose constantemente para así incrementar las rentas cosechadas.
De esta forma arribaban a la segunda transición, con un hueco importante sobre los perseguidores y seguros de que el podio estaría entre ellos. Y en ese momento fue cuando Gómez Noya mostró su superioridad y dejó atrás a los compañeros de escapada, tomando las riendas desde los primeros compases de este último sector de carrera a pie. Un dominio inquebrantable en una prueba vertiginosa que permitió al gallego de oro entrar en solitario y disfrutar así del cariñoso aplauso del público que llenaba las gradas de la línea de meta.
Javier Gómez Noya se proclamó campeón de España de triatlón sprint con un tiempo de 55:02. Escudando al ferrolano, David Castro conquistaba la segunda posición (56:03) y Nan Oliveras era el tercer clasificado (56:10), después de efectuar una extraordinaria carrera a pie en la que solventaba una diferencia cercana a los 30 segundos para escalar posiciones hasta la tercera plaza final.
En la categoría sub 23, se proclamó campeón de España David Castro, mientras que el segundo clasificado fue Nan Oliveras y el bronce recayó en Antonio Benito. En la clasificaciones de clubes 23 masculino, el campeón de España es Diablillos de Rivas.
A la conclusión de la prueba, Gómez Noya señalaba que “la idea era ganar, pero además estoy contento porque hice una buena carrera. Estoy satisfecho por el resultado, por correr en casa y por el cariño del público. El público de Pontevedra ya demostró en otras ocasiones que siempre responde. Estoy muy agradecido a ellos por estar aquí con este calor”, indicó al campeón del mundo. Javi quiso dejar claro que con el título no se ganan las carreras: “no puedes relajarte nunca y además en esta carrera había un nivel altísimo”.
Por su parte, en chicas el título de campeona de España recaía en Estefanía Domínguez. La extremeña conseguía el triunfo después de realizar una fulgurante carrera a pie, en la que lograba adaptarse y sacar partido a las condiciones meteorológicas de fuerte calor y humedad. Intenso final en el que la triatleta del Cidade de Lugo Fluvial, iba remontando posiciones para alcanzar el cetro de la modalidad. Medalla de plata para Camila Alonso y bronce para Anna Godoy en un disputado tramo final de carrera a pie.
El podio Sub23 ha estado liderado por Camila Alonso, seguida de Anna Godoy y de Laura Gómez. Por clubes las triatletas del CT Diablillos de Rivas subían a lo más alto del podio.