La bajada de las temperaturas no solo han dejado malas noticias relacionadas con el frío. También hay un sector que se ve en gran medida beneficiado por la llegada de la nieve a la alta montaña. Se trata de las pistas de esquí que se garantizan, así, una temporada de bonanza y muchos clientes.
Si tuviéramos que hacer un repaso a las mejores estaciones de esquí en Europa sin duda alguna de estas serían las elegidas para pasar unas buenas vacaciones en contacto con la nieve y la naturaleza: Serfaus-Fiss-Ladis, en Austria está considerada como la mejor estación de esquí. Tras consultar a más de 40.000 personas sobre sus preferencias, este enclave situado en los altos de Austria ha sido de las mejor valoradas. En plenos Alpes, su oferta en alojamiento, confort, comodidad y gastronomía es altamente valorado por todos.
Suiza también cuenta con un papel importante a la hora de esquiar. De hecho su estación en Saas Fee es la primera elección de los viajeros. Allí puedes hacer, además otro tipo de deportes alternativos como trekking o mountain bike. Si el deporte te colapsa, la estación cuenta incluso con la organización de diferentes talleres para pasar la tarde en familia haciendo cosas diferentes como aprender a cocinar o echar un vistazo en su enorme biblioteca. Saas Fee cuenta con un circuito termal al aire libre, también. En los Alpes suizos no debe faltar una visita a otra mítica estación. Se trata de Zermatt, con más de 300 kilómetros esquiables y el primer destino en práctica de Snowboard de toda Europa. Se da la curiosidad que a su entorno solo se puede acceder en coches eléctricos y carros de caballo para mantener al mínimo los niveles de contaminación ambiental. No te pierdas las actividades nocturnas que organizan con la posibilidad de cenar en lo más alto de los picos y volver al hotel esquiando solo iluminados con la luna llena.
En los pirineos franceses, alguna vez habrás escuchado en televisión la zona de Val D’Isere mientras cientos de ciclistas se retan en lo alto para ganar una de las etapas más laureadas del Tour de Francia. Pero allí no solo se encuentra la meta, también una de las estaciones más halagadas por los amantes de este deporte. También en los Alpes, este lugar conforma el espacio para esquiar más bonito del mundo con cumbres de más de 4.000 metros donde esquiadores profesionales entrenan a diario en la pista de Bellevarde, con un descenso que pone los pelos de punta. Música en directo, cenas al aire libre y multitud de actividades podrás encontrar durante tu estancia allí. Es sin duda uno de los top ten más importantes.
Entre las pistas españolas más populares están las de Sierra Nevada y Baqueira Beret. La primera se encuentra en Granada, a unos 30 kilómetros de su capital es la más meridional de Europa. Cuenta con 79 pistas y está rodeado de su Parque Nacional repleto de vegetación y fauna ibérica. Puedes practicar senderismo, trekking o bicicleta de montaña además de esquiar. Y si tanta nieve te aburres, en apenas una hora puedes plantarte en la costa andaluza y disfrutar de sus playas. En Baqueira Beret no hay playa pero el Valle de Arán cuenta con un encanto especial. A poco más de 150 kilómetros es uno de los complejos de esquí más grandes de Europa con 120 kilómetros de pista y donde puedes divertirte también haciendo rafting o paracaidismo. Ideal para pasar una Semana Santa en familia con los más pequeños. Esos que siempre nos pasan a gran velocidad por las pistas desde muy temprana edad.