Un estudio demuestra que la oxigenación cerebral puede ser clave en el éxito de los atletas kenianos

El doctor Jordan Santos-Concejero es colaborador de la revista Sportraining y fue uno de los ponentes en el recientemente celebrado 6º Simposio nacional y 1º Internacional sobre Entrenamiento para Deportes de Resistencia, organizado por Sportraining en la UEM.

Texto: Oficina de comunicación de la UPV/EHU

El doctor Jordan Santos-Concejero, del Departamento de Educación Física y Deportiva de la UPV/EHU, llevó a cabo un estudio cuyo propósito fue analizar la respuesta de la oxigenación cerebral a ritmo máximo y progresivo en los corredores de élite kenianos de la tribu Kalenjin. Estos resultados fueron presentados a la comunidad científica en el European Congress of Sport Science en Amsterdam en julio pasado, en el que optó al Young Investigator Award, y ahora han sido publicados por Journal of Applied Physiology. El estudio muestra que los corredores kenianos son capaces de mantener su oxigenación cerebral dentro de un rango estable, lo puede contribuir a su éxito en carreras de larga distancia.

xLas pruebas se realizaron en los laboratorios de la Research Unit for Exercise Science and Sports Medicine (Universidad del Cabo) y la Universidad de Stellenbosch en Sudáfrica, y para el estudio se eligió una muestra de kenianos de élite (15, todos ellos de la tribu Kalenjin), atletas de gran nivel con marcas en media maratón entre 1.01 y 1.03. Se estudió la oxigenación cerebral durante el ejercicio (básicamente cambios en la oxihemoglobina, deoxihemoglobina, flujo sanguíneo, saturación arterial…) a través de NiRS (Near-infrared Spectroscopy) y oximetría durante una prueba máxima de 5 kilómetros y un test máximo incremental.

«En contra de todo lo publicado en la literatura -explica el doctor Santos-Concejero-, vimos que los kenianos eran capaces de mantener su oxigenación de manera estable durante la prueba de 5 kilómetros, lo que tiene implicaciones para el rendimiento de los atletas».

Cuando la oxigenación cerebral en el lóbulo prefrontal cae, se ha visto que la actividad neural de esa zona también cae. Esa zona está muy relacionada con el control del movimiento y la toma de decisiones, por lo que se ha propuesto que la caída en la activación neuronal podría explicar la caída del rendimiento que se ha observado en atletas europeos, al caer la oxigenación cerebral. Como en los atletas kenianos esta caída no ocurre, «creemos que la activación neuronal en el lóbulo prefrontal no se ve comprometida y quizá esa capacidad de mantener su oxigenación cerebral de manera estable pueda contribuir a su gran rendimiento en las pruebas de fondo», explica el profesor de la UPV/EHU.

El estudio también se ha fijado en las posibles causas de esta particularidad de los atletas africanos y atribuye su oxigenación cerebral estable durante esfuerzos máximos a factores de vida tempranos como la exposición prenatal a alta altitud y los grandes niveles de actividad física durante la niñez. «La exposición prenatal a alta altitud tiene unos efectos protectores sobre el feto, un mayor flujo de sangre a la arteria uterina, que podría implicar una mayor capacidad cardiopulmonar en la madurez y, por consiguiente, una menor incidencia de la desaturación arterial durante ejercicios de alta intensidad», concluye el estudio.

Por otra parte, la práctica de ejercicio físico de manera habitual durante la niñez implica beneficios como incrementos en la masa ventricular, coordinación motora, menores niveles de citoquinas y, lo más importante, un mayor crecimiento neural consecuencia de una mayor vascularización del encéfalo. «Este último punto podría explicar también parcialmente el que su oxigenación cerebral se mantenga durante esfuerzos máximos», afirma Jordan Santos-Concejero.

Referencia bibliográfica: ‘Maintained cerebral oxygenation during maximal self-paced exercise in elite Kenyan runners’. Jordan Santos-Concejero, François Billaut, Lara Grobler, Jesús Oliván, Timothy David Noakes, Ross Tucker. Journal of Applied Physiology. Published 20 november 2014. DOI: 10.1152/japplphysiol.00909.2014.
http://jap.physiology.org/content/early/2014/11/13/japplphysiol.00909.2014

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